Sí, es cierto, no sé si por obra divina o del diablo, pero he ganado un primer premio de fotografía. Ha sido en el Maratón fotográfico de Luzón del que os hablaba en la anterior entrada y os dejo el link para que podáis corroborarlo.
http://www.fundacionconchamarquez.es/index.php?option=com_content&task=view&id=91&Itemid=154
Como muchos ya sabéis, el primer premio no era económico y consistía en disfrazarse de diablo como uno más de Luzón en los carnavales de 2012 (intentaré estar a la altura del evento). El segundo y tercer premio eran de 300 € y 200 € respetivamente. Al principio dices: mejor haber quedado 2º o 3º, pero al final ... también, jeje. El caso es que no hay vuelta atrás y el año que viene seré diablo y cargaré con los pesados cencerros a la cintura y los cuernos en la cabeza, sin olvidar el hollín con aceite que con el que me embadurnaré la cara y los brazos.
L cuestión es que me he llevado un alegrón gracias a una foto a la que tengo mucho cariño desde este sábado. Cuando presenté las fotos no era de mis favoritas, porque debido a que estaba anocheciendo y a la rapidez del momento no la pude sacar todo lo enfocada y nítida que quería, pero según han ido pasando los días me ha ido gustando más y más porque el momento captado me parece muy divertido y original- se muestra a un enorme diablo de figura imponente, abalanzándose sobre una indefensa mujer que sabe que va a ser pintada por las garras de Lucifer sin poder hacer nada- y sobre todo, porque la foto parece de otra época, ayudando para ello la indumentaria de la mujer- a la que ya de paso le agradezco que estuviera en el lugar y momento adecuados- y el formato blanco y negro que elegí para el concurso.
Fotografía Ganadora del Maratón Fotográfico de Luzón |
Os preguntaréis cómo se me ocurrió la foto (si no os lo habéis preguntado da igual, porque os lo voy a contar de todos modos). Desde que se estaban preparando, de todos los diablos observé que había uno especialmente inquieto, que vivía la ceremonia de una manera fanática, desmesurada... y que disfrutaba de lo lindo con la representación. Ése fue mi diablo a seguir, y más cuando en la plaza del pueblo empezó a asustar a todo el que se cruzaba en su camino intentando pintarle y protagonizando auténticas carreras similares a un encierro. Entonces pensé, ¿por qué no hacer una fotografía de este diablo pintando la cara a alguien? Lo intenté unas cuantas veces pero era muy complicado, por toda la gente y fotógrafos que estábamos presentes y por cómo se movía el demonio, pero al fin logré mi propósito y el resultado ya lo conocéis.
Primer Premio Maratón Fotográfico de Luzón |
Por último, daros las gracias a todos los que me habéis apoyado y a los que aguantáis con paciencia mi aficción fotográfica.
P.D. Estáis todos invitados al Carnaval de Luzón 2012; seguro que os lo pasáis bien y prometo no pintaros mucho.